Saturday, February 21, 2004
Bueno, finalmente volvimos a Motueka... es dificil volver a la realidad. Luego de subir 1000 kilometros por la costa oeste, con un pequeño vistaso de Dunedin (donde juegan los All Blacks) a 50km/h y una noche en Chrischurch estamos nuevamente en "casa"...
Volvimos y como estamos sin un peso de lo que ganamos en el mes anterior, ya nos metimos a sacar Peras... en realidad de buena onda del jefe que nos deja ganarnos unos mangos para pagar el internet! El Lunes empieza la Fruit Picking, la supuesta temporada de rejunte de manzanas donde me han prometido mas guita que durante la fiebre del oro... pero no me entusiasmo.
Como no puede pasar de otra manera, me voy a algun lado y, o se cae el sistema bancario, o el pais donde estoy se inunda. Bueno, aca se inundo fiero algunas zonas de la isla norte. Yo estoy en el sur, esta mas fresco, pero todo maravillosamente SECO. Asi que madre y demas intereseados... las manzanas siguen en sus arboles y mi casa sigue en su sitio, no se fue flotando.
Bueno, por un tiempo no habra historias de saltos de 200 metros ni travesias por el pacificio... pero para eso laburamos.
Volvimos y como estamos sin un peso de lo que ganamos en el mes anterior, ya nos metimos a sacar Peras... en realidad de buena onda del jefe que nos deja ganarnos unos mangos para pagar el internet! El Lunes empieza la Fruit Picking, la supuesta temporada de rejunte de manzanas donde me han prometido mas guita que durante la fiebre del oro... pero no me entusiasmo.
Como no puede pasar de otra manera, me voy a algun lado y, o se cae el sistema bancario, o el pais donde estoy se inunda. Bueno, aca se inundo fiero algunas zonas de la isla norte. Yo estoy en el sur, esta mas fresco, pero todo maravillosamente SECO. Asi que madre y demas intereseados... las manzanas siguen en sus arboles y mi casa sigue en su sitio, no se fue flotando.
Bueno, por un tiempo no habra historias de saltos de 200 metros ni travesias por el pacificio... pero para eso laburamos.
Tuesday, February 17, 2004
Luego de haber hecho el bunjy, de alguna forma quede con cierta terrible resaca post adrenalina. A las pocas horas de pegar el salto, nos subimos al auto y seguimos viaje hacia el sur. Mientras yo me pegaba una siesta en el asiento de atras, los chicos compraron comida para 10 dias. El plan, que lo habiamos hablado antes era irnos a la Stewart Island, la tercer isla de Nueva Zelanda (nota educativa: NZ tiene mas de 2 islas! y Fiji, 333!!!) a hacer un circuito de tramping laaargo...
Luego de haberla pasado tan bien en Queenstown, lo ultimo que tenia intenciones de hacer era meterme en el bosque... asi que mis dudas crecian mientras viajabamos para abajo.
El plan era el siguiente, nos ibamos a la Stewarts, a hacer un tramping de 7 dias, 100 kilometros, en uno de los trayectos mas dificiles del pais. No por que halla serpientes asesinas ni nada por el estilo, sino por que el 98% del recorrido estaba compuesto por barro, y piletas de lodo de hasta 50 cms.
La idea, sin entusiasmarme todavia, seguia en pie. Vaciamos las mochilas, y las llenamos de una muda de ropa limpia y 15 kilos de comida, para que nos dure la totalidad del viaje.
A las 7 de la ma¤ana del otro dia, nos levantamos y rumbeamos al aeropuerto. Por alguna razon magica, nos salia mas barato ir en avion. El piloto nos esperaba especialmente a nosotros. Junto a otras 3 personas nos subimos a lo que seria el avion mas peque¤o al que me halla montado en mi vida.
El vuelo, de 25 minutos no dejo de ser espectacular. Por ese tiempo me habia olvidado de a donde me iba. Bordeamos la isla, con un paisaje a lo Jurassic Park, con monta¤as y playas hermosisimas.... el problema era que todo eso que hacia en avion despues lo tenia que caminar!!!
Obviamente en una isla casi salvaje, no habia ningun aeropuerto ni free shop que nos reciba. El avion, luego de sobrevolar dos veces y dando vueltas de 180 grados, aterrizo en el medio de la playa. Sublime...
Bajamos del lujo aeronautico, a una playa con un viento que me tiraba para atras, ahi es cuando caigo a la realidad. Estaba en la otra punta de la isla, con 15 kilos de noodles a 7 dias de la proxima ducha caliente. Vaya para donde vaya. Ahi me pongo a pensar, si quedarme a dormir en esa isla y tomarme el avion al otro dia y dejarme de hinchar o hacer esa locura.
Todo sumado a la motivacion de German y Gregorio de hacer la caminata, el primero para no gastar plata en hoteles y el segundo con mas ingenuidad que espiritu aventurero.
El primer dia fue el mas largo de mi vida, 9 horas caminando, 17 kilometros, sin ningun punto de referencia de lo que era lo que estaba haciendo. Encima en ese trayecto no habia arroyos de donde recargar agua. Y yo, como nuestra guia prometia una caba¤a a las 7 horas de camino, ya me habia tomado el agua dos horas antes de llegar. Todo sumado al barro, que es un tema para un parrafo aparte.
El calzado recomendado para este tramping era unas botas a prueba de agua, que a recomendacion de un Irlandes con el que charle sobre mi duda de meterme en la selva podia comprarme unas usadas a 300 dolares (flaco, con esa guita vive una familia en cualquier pais que no hablen ingles o aleman). Obviamente, con mis Adidas de base plana, especiales para usar patineta, creo que de ir descalzo la hubiese pasado mejor. El camino, marcado por unas marcas amarillas cada cuanto el instinto dejaba de funcionar, estaba compuesto ciento por ciento de barro, lodo, mierda. Al principio, tratando de no mojarme mi unica proteccion terrestre, tratabamos de saltar entre ramitas y no pisar nada que manchen mis queridas zapatillitas made in taiwan. A los 20 minutos de saltitos, una pisada en falso, meten mi pierna derecha hasta el fondo. Cubierto de barro hasta los tobillos, mis zapatillas ya empiezan a hacer ruido de sapo cada vez que doy un paso.
A la novena hora de caminar, realmente cierta desesperacion me pasaba por la mente. German (jamas depender de el en un bosque), se habia adelantado hace rato, con el mapa y mi unica referencia. Grego, atras mio deberia estar igual que yo.
Ya las subidas y las bajadas, eran interminables e insufribles. Las subidas, hacian que mis muslos y gemelos ardan. Las bajadas, una subida de la posibilidad de patinarme y lo peor, la obvia significacion de que despues habria otra subida.
Finalmente, un techo se asoma detras del proximo monte. No creo haber sentido otro alivio semejante en mi vida.
Final del dia, me saco las sapatillas negras y duras de barro, las medias las tiro al fuego, me cambio la remera empapada de transpiracion, me como mi racion de noodles (fideitos pedorros), escucho la palabra de aliento de la pareja de ingleses que estan en su quinto dia de caminata, y que por cierto se quedan una noche extra para descansar, y me voy a dormir mis 10 horas.
El resto de los dias fue semejante en sufrimiento, pero cada dia distinto en lo increible del lugar al tiempo de que tomaba conciencia de donde estaba mientras el corazon se hacia mas fuerte y mi mochila menos pesada. Pasamos entre paisajes desolados, playas larguisimas en el medio de la nada, cumbres de monta¤as donde se veian todos los arboles desde arriba a kilometros de distancia, puentes colgantes que soportaban a una sola persona, atardeceres y amaneceres unicos. Uno de los dias, tuve la suerte de ver un Kiwi, el animal icono del pais. La mayoria de la gente que viene a Nueva Zelanda se va sin ver uno de estos animales sino es en un zoologico, y a mi se me cruza por el medio.
Los dias pasaban, miles de caidas en el medio, un par de personas que encontraban en el camino y habian tomado la misma desicion (erronea?) de meterse en el medio de la selva. Las comidas, noodles, ya dejaban de ser una molestia y eran un manjar luego de caminar 15 kilometros por dia.
El dia final llego, de golpe con Grego avistamos la salida, otra sensacion de alegria incontenible. Nos volvemos caminando hacia el pueblo, otros 5 kilometros por la carretera y nadie nos quiere levantar (sera el olor a 7 dias), pero somos felices. Voy cantando, alegre. Las piernes me hierven. Encima la carretera tiene subidas y bajadas. Tengo mis plantas de los pies arrugadas, la cara llena de barro, huelo el olor a limpio de la gente! Pero soy feliz, la sonrisa no me la saca nadie. Estas son las experiencias que se sufren durante y se disfrutan el resto de la vida. Para algo la gente sube al aconcagua, corre marathones, bueno, yo me meto en el barro.
Nos tomamos un ferry, me encuentro con la pareja que me dio aliento el primer dia, me ofrece unas papa fritas!! pero no puedo aceptar, tengo las manos negras de lodo.
Nos tomamos el ferry, una hora, la duermo. Agarramos el auto y nos vamos a Invercagill, al esperado hostel con colchon, ba¤o caliente, queiro un BURGER KING!!! Llegamos al hotel y no hay lugares!!! Estan todos los hostels llenos. El disfrute lo retrasamos, nos subimos al auto y nos vamos 200 kilometros al norte, a un pueblito que se llama Milton. Nos recibe un Suizo feng shui, que nos mete en habitaciones separadas para mantener el equilibrio. No me importa, tiene ducha caliente. Me gasto un jabon entero, una nueva persona, de vuelta a la civilizacion. Y con un recuerdo de 100 kilometros en 7 dias que por un tiempo no pienso repetir...
Luego de haberla pasado tan bien en Queenstown, lo ultimo que tenia intenciones de hacer era meterme en el bosque... asi que mis dudas crecian mientras viajabamos para abajo.
El plan era el siguiente, nos ibamos a la Stewarts, a hacer un tramping de 7 dias, 100 kilometros, en uno de los trayectos mas dificiles del pais. No por que halla serpientes asesinas ni nada por el estilo, sino por que el 98% del recorrido estaba compuesto por barro, y piletas de lodo de hasta 50 cms.
La idea, sin entusiasmarme todavia, seguia en pie. Vaciamos las mochilas, y las llenamos de una muda de ropa limpia y 15 kilos de comida, para que nos dure la totalidad del viaje.
A las 7 de la ma¤ana del otro dia, nos levantamos y rumbeamos al aeropuerto. Por alguna razon magica, nos salia mas barato ir en avion. El piloto nos esperaba especialmente a nosotros. Junto a otras 3 personas nos subimos a lo que seria el avion mas peque¤o al que me halla montado en mi vida.
El vuelo, de 25 minutos no dejo de ser espectacular. Por ese tiempo me habia olvidado de a donde me iba. Bordeamos la isla, con un paisaje a lo Jurassic Park, con monta¤as y playas hermosisimas.... el problema era que todo eso que hacia en avion despues lo tenia que caminar!!!
Obviamente en una isla casi salvaje, no habia ningun aeropuerto ni free shop que nos reciba. El avion, luego de sobrevolar dos veces y dando vueltas de 180 grados, aterrizo en el medio de la playa. Sublime...
Bajamos del lujo aeronautico, a una playa con un viento que me tiraba para atras, ahi es cuando caigo a la realidad. Estaba en la otra punta de la isla, con 15 kilos de noodles a 7 dias de la proxima ducha caliente. Vaya para donde vaya. Ahi me pongo a pensar, si quedarme a dormir en esa isla y tomarme el avion al otro dia y dejarme de hinchar o hacer esa locura.
Todo sumado a la motivacion de German y Gregorio de hacer la caminata, el primero para no gastar plata en hoteles y el segundo con mas ingenuidad que espiritu aventurero.
El primer dia fue el mas largo de mi vida, 9 horas caminando, 17 kilometros, sin ningun punto de referencia de lo que era lo que estaba haciendo. Encima en ese trayecto no habia arroyos de donde recargar agua. Y yo, como nuestra guia prometia una caba¤a a las 7 horas de camino, ya me habia tomado el agua dos horas antes de llegar. Todo sumado al barro, que es un tema para un parrafo aparte.
El calzado recomendado para este tramping era unas botas a prueba de agua, que a recomendacion de un Irlandes con el que charle sobre mi duda de meterme en la selva podia comprarme unas usadas a 300 dolares (flaco, con esa guita vive una familia en cualquier pais que no hablen ingles o aleman). Obviamente, con mis Adidas de base plana, especiales para usar patineta, creo que de ir descalzo la hubiese pasado mejor. El camino, marcado por unas marcas amarillas cada cuanto el instinto dejaba de funcionar, estaba compuesto ciento por ciento de barro, lodo, mierda. Al principio, tratando de no mojarme mi unica proteccion terrestre, tratabamos de saltar entre ramitas y no pisar nada que manchen mis queridas zapatillitas made in taiwan. A los 20 minutos de saltitos, una pisada en falso, meten mi pierna derecha hasta el fondo. Cubierto de barro hasta los tobillos, mis zapatillas ya empiezan a hacer ruido de sapo cada vez que doy un paso.
A la novena hora de caminar, realmente cierta desesperacion me pasaba por la mente. German (jamas depender de el en un bosque), se habia adelantado hace rato, con el mapa y mi unica referencia. Grego, atras mio deberia estar igual que yo.
Ya las subidas y las bajadas, eran interminables e insufribles. Las subidas, hacian que mis muslos y gemelos ardan. Las bajadas, una subida de la posibilidad de patinarme y lo peor, la obvia significacion de que despues habria otra subida.
Finalmente, un techo se asoma detras del proximo monte. No creo haber sentido otro alivio semejante en mi vida.
Final del dia, me saco las sapatillas negras y duras de barro, las medias las tiro al fuego, me cambio la remera empapada de transpiracion, me como mi racion de noodles (fideitos pedorros), escucho la palabra de aliento de la pareja de ingleses que estan en su quinto dia de caminata, y que por cierto se quedan una noche extra para descansar, y me voy a dormir mis 10 horas.
El resto de los dias fue semejante en sufrimiento, pero cada dia distinto en lo increible del lugar al tiempo de que tomaba conciencia de donde estaba mientras el corazon se hacia mas fuerte y mi mochila menos pesada. Pasamos entre paisajes desolados, playas larguisimas en el medio de la nada, cumbres de monta¤as donde se veian todos los arboles desde arriba a kilometros de distancia, puentes colgantes que soportaban a una sola persona, atardeceres y amaneceres unicos. Uno de los dias, tuve la suerte de ver un Kiwi, el animal icono del pais. La mayoria de la gente que viene a Nueva Zelanda se va sin ver uno de estos animales sino es en un zoologico, y a mi se me cruza por el medio.
Los dias pasaban, miles de caidas en el medio, un par de personas que encontraban en el camino y habian tomado la misma desicion (erronea?) de meterse en el medio de la selva. Las comidas, noodles, ya dejaban de ser una molestia y eran un manjar luego de caminar 15 kilometros por dia.
El dia final llego, de golpe con Grego avistamos la salida, otra sensacion de alegria incontenible. Nos volvemos caminando hacia el pueblo, otros 5 kilometros por la carretera y nadie nos quiere levantar (sera el olor a 7 dias), pero somos felices. Voy cantando, alegre. Las piernes me hierven. Encima la carretera tiene subidas y bajadas. Tengo mis plantas de los pies arrugadas, la cara llena de barro, huelo el olor a limpio de la gente! Pero soy feliz, la sonrisa no me la saca nadie. Estas son las experiencias que se sufren durante y se disfrutan el resto de la vida. Para algo la gente sube al aconcagua, corre marathones, bueno, yo me meto en el barro.
Nos tomamos un ferry, me encuentro con la pareja que me dio aliento el primer dia, me ofrece unas papa fritas!! pero no puedo aceptar, tengo las manos negras de lodo.
Nos tomamos el ferry, una hora, la duermo. Agarramos el auto y nos vamos a Invercagill, al esperado hostel con colchon, ba¤o caliente, queiro un BURGER KING!!! Llegamos al hotel y no hay lugares!!! Estan todos los hostels llenos. El disfrute lo retrasamos, nos subimos al auto y nos vamos 200 kilometros al norte, a un pueblito que se llama Milton. Nos recibe un Suizo feng shui, que nos mete en habitaciones separadas para mantener el equilibrio. No me importa, tiene ducha caliente. Me gasto un jabon entero, una nueva persona, de vuelta a la civilizacion. Y con un recuerdo de 100 kilometros en 7 dias que por un tiempo no pienso repetir...
Monday, February 09, 2004
Aaaaaaaaaaaaaaaaaahhhhhh!!! Acabo de tener la sensacion mas increibleeeeeeee.... es tan la excitacion, que ahora mientras los chicos estan cocinando me meti en internet para escribir lo que tengo en la cabeza fresquito....
A las doce del mediodia nos fuimos a la central donde habia que tomarnos el micro que nos llevaba a la zona donde esta el salto. Preferi no comer nada, me compre un jugo de naranja y me puse a meditar. No fear!!!!
Nos llaman, subimos al micro, 40 minutos de viaje, sigo meditando, no sentia miedo, realmente la meditacion sirve...
Nos pesan, peso 79! baje un kilo... grego 66 (engordo) y german 55 (era mas flaco que las chicas que saltaban). Llegamos al lugar, en el medio de dos montanias, a 140 metros de altura, una casita, vista desde afuera parecia miniatura, colgada de dos cables. Empiezan a decir los nombres de la primer tanda que va a saltar: "Dario, come please"... la reconch... me subo al coso que nos trasporta a la cosa para saltar... me fijo en los pesos de los otros pibes para ver quien salta primero... 75,78,77... carajo, soy el mas grandote... Llegamos al lugar, nos enganchan un arnes, teniamos un agarra huevos, y de ahi salia un gancho... Nos ponen unas tobilleras gigantes... ponen musica pesadisima a todo lo que da, hay que subir la adrenalina... primera victima: "Dario, come please" .... no safo en ninguna. Valiente, frente en alto, me acerco, me sacan el arnes, me hacen sentarme en una silla de dentista, me enganchan algo de los pies, no me interesaba, me explica que tengo que tirar, despues del segundo rebote, de una soga hacia la izquierda, me dice que salude a la camara, le respondo "no me rompas!", me hace parar... voy caminando como preso con esposas en los pies hasta el trampolin, no hay tiempo de pensar, me decido a subir el nivel de adrenalina y empiezo a gritar algunas cosas en holandes... me hace que mire a la camara que estaba a la izquierda, para que!!! quiero saltaaaaaaaar! empieza la cuenta regresiva... "three, two, one..."
Desde aca, otra historia, el salto vale un millon de dolares.
No pienso, estaba con la sangre que me fluia por cada de las venas y las sentia. Me avalanzo un poco hacia adelante y me empujo con los pies... abro los brazos... uno, dos, tres... gritando, gregorio me dijo que se escuchaba desde la otra punto de la montania... siento la velocidad, estoy cayendo a 140 kilometros por hora hacia el piso, pero no me importaba, una sensacion... de golpe, no puedo gritar mas... no se que me paso, se me acabo el aire, no se... cuatro, cinco, seis... sigo volando, pero la sensacion es distinta, parece que no estoy cayendo mas... otro segundo, y siento un tiron, muy delicado reboto... me voy para arriba... me empiezo a cagar de risa... de golpe... caigo de nuevo... uno, dos, tres.... reboto... caigo de nuevo... tiro del cordon que deberia ponerme en una posicion sentado, pero no hay caso... me despreocupo, y me quedo cabeza para abajo, no puedo parar de reir, me empiezan a subir, me siento como un salmon recien sacado del mar, me suben a la cabina y me liberan... sonrisa de punta a punta, miro a la otra gente, y soy el unico que sonrie, estan los otros pibes que van a saltar, con terrible cara de preocupacion. Sigo repitiendo en mi cabeza lo que acabo de vivir, a los 10 minutos, traen a Gregorio y a German a la gondola. Grego, esta aterrado, el otro ni una muestra. Se van tirando todos, le toca a grego, salta, cuando vuelve, esta tan loco, que hasta se ponia a bailar, vuelve con los ojos rojos, a mi tambien, de alguna forma se te sube toda la sangre a la cabeza... No mas que hacer... sigo felizzzzzzzzzzzz... y german ya se quiere ir de tramping......... que le vamos a hacer... pero volvi! Madre, sigo en pie... ya vendran otros saltos, cuando vuelva a tener plata.
Fotos... mias no muchas, obviamente el que sabe sacar fotos, es el que no recibe sus fotos, ya subire unos videos del salto de Grego que filme yo.
A las doce del mediodia nos fuimos a la central donde habia que tomarnos el micro que nos llevaba a la zona donde esta el salto. Preferi no comer nada, me compre un jugo de naranja y me puse a meditar. No fear!!!!
Nos llaman, subimos al micro, 40 minutos de viaje, sigo meditando, no sentia miedo, realmente la meditacion sirve...
Nos pesan, peso 79! baje un kilo... grego 66 (engordo) y german 55 (era mas flaco que las chicas que saltaban). Llegamos al lugar, en el medio de dos montanias, a 140 metros de altura, una casita, vista desde afuera parecia miniatura, colgada de dos cables. Empiezan a decir los nombres de la primer tanda que va a saltar: "Dario, come please"... la reconch... me subo al coso que nos trasporta a la cosa para saltar... me fijo en los pesos de los otros pibes para ver quien salta primero... 75,78,77... carajo, soy el mas grandote... Llegamos al lugar, nos enganchan un arnes, teniamos un agarra huevos, y de ahi salia un gancho... Nos ponen unas tobilleras gigantes... ponen musica pesadisima a todo lo que da, hay que subir la adrenalina... primera victima: "Dario, come please" .... no safo en ninguna. Valiente, frente en alto, me acerco, me sacan el arnes, me hacen sentarme en una silla de dentista, me enganchan algo de los pies, no me interesaba, me explica que tengo que tirar, despues del segundo rebote, de una soga hacia la izquierda, me dice que salude a la camara, le respondo "no me rompas!", me hace parar... voy caminando como preso con esposas en los pies hasta el trampolin, no hay tiempo de pensar, me decido a subir el nivel de adrenalina y empiezo a gritar algunas cosas en holandes... me hace que mire a la camara que estaba a la izquierda, para que!!! quiero saltaaaaaaaar! empieza la cuenta regresiva... "three, two, one..."
Desde aca, otra historia, el salto vale un millon de dolares.
No pienso, estaba con la sangre que me fluia por cada de las venas y las sentia. Me avalanzo un poco hacia adelante y me empujo con los pies... abro los brazos... uno, dos, tres... gritando, gregorio me dijo que se escuchaba desde la otra punto de la montania... siento la velocidad, estoy cayendo a 140 kilometros por hora hacia el piso, pero no me importaba, una sensacion... de golpe, no puedo gritar mas... no se que me paso, se me acabo el aire, no se... cuatro, cinco, seis... sigo volando, pero la sensacion es distinta, parece que no estoy cayendo mas... otro segundo, y siento un tiron, muy delicado reboto... me voy para arriba... me empiezo a cagar de risa... de golpe... caigo de nuevo... uno, dos, tres.... reboto... caigo de nuevo... tiro del cordon que deberia ponerme en una posicion sentado, pero no hay caso... me despreocupo, y me quedo cabeza para abajo, no puedo parar de reir, me empiezan a subir, me siento como un salmon recien sacado del mar, me suben a la cabina y me liberan... sonrisa de punta a punta, miro a la otra gente, y soy el unico que sonrie, estan los otros pibes que van a saltar, con terrible cara de preocupacion. Sigo repitiendo en mi cabeza lo que acabo de vivir, a los 10 minutos, traen a Gregorio y a German a la gondola. Grego, esta aterrado, el otro ni una muestra. Se van tirando todos, le toca a grego, salta, cuando vuelve, esta tan loco, que hasta se ponia a bailar, vuelve con los ojos rojos, a mi tambien, de alguna forma se te sube toda la sangre a la cabeza... No mas que hacer... sigo felizzzzzzzzzzzz... y german ya se quiere ir de tramping......... que le vamos a hacer... pero volvi! Madre, sigo en pie... ya vendran otros saltos, cuando vuelva a tener plata.
Fotos... mias no muchas, obviamente el que sabe sacar fotos, es el que no recibe sus fotos, ya subire unos videos del salto de Grego que filme yo.
Un hombre sabio dijo... depende de la gente que conozcas el viaje sera bueno o malo. Por suerte aca en QUeenstown nos hicimos de una banda, que realmente hizo que estos dias hallan sido los mejores hasta el momento. Lamentablemente como es comun en un viaje, ya cada uno se fue para un lugar distinto... nada es para siempre.
El primer dia de Queenstown nos dedicamos a recorrerlo, la ciudad, como dije antes, es una especie de Bariloche, es un centro de ski en invierno, con 2 calles peatonales principales donde estan todas empresas que ofrecen deportes extremos. Valga el dato, Queenstown segun dicen es "la capital de los deporte de aventura".
Dimos vueltas, relajamos del viaje y a la noche con Grego nos fuimos a un bar, World Bar, uno de los tantos bares que hay por esta zona. German se quedo viendo una pelicula...
Con mi remera naranja de Holanda, que en argentina seria fashion, aca parecia un canto patriota pro Maxima Zorregueta y el Gobierno de la Naranja Mecanica, lo que produjo que desde los 10 segundos que entre al bar se me acerquen minimo, 10 holandeses (lamentablemente solo holandesEs) a preguntarme si era holandes (con la pinta que tenia, con barba record, dudo que lo crean)... pasadas las mil y una nos encontramos con un grupo de 5 tucumanas que venian de viaje de estudio... nada mas interesante que contar de eso...
Otro dia, Domingo, nos levantamos y nos fuimos a hacer el almuerzo, la noche anterior uno de los holandeses me dijo que en la cancha de rugby de la ciudad se armaba un campeonato de futbol... y justo en la cocina del hostel conocimos a iñaki, un madrileño y Tomo un loco, tambien, de Holanda... ahi armamos equipo...
Luego de comernos nuestra rica pizza recalentada del dia anterior, nos fuimos a la cancha.
Nuestro equipo: un holandes, una holandesa, un isreali, un americano de minesotta, Grego y yo. Obviamente ganamos..! un solo partido... un desastre... pero igual felices...
De ahi, cervezas y spa... a eso de las 10pm, nos fuimos todos mas otra gente que encontrabamos por el camino, hasta un bar... y de ahi... es otra historia....
Hoy, son las 10.35 am del Lunes 9 de Febrero, no hay vuelta atras, tenemos pagado, estamos en la corniza... en 2 horas me voy a tirar de Bunjy Jumping!!! El mas alto de Nueva Zelanda y el segundo, creo, mas alto del mundo... con los chicos tenemos un trato de no hablar del tema por que estamos cagados en las patas............... prefiero escribir la experiencia despues de esto... bueno, no os preocupeis... que seguro que volvemos...........
Bunjyyyyyyyyyyyyy
El primer dia de Queenstown nos dedicamos a recorrerlo, la ciudad, como dije antes, es una especie de Bariloche, es un centro de ski en invierno, con 2 calles peatonales principales donde estan todas empresas que ofrecen deportes extremos. Valga el dato, Queenstown segun dicen es "la capital de los deporte de aventura".
Dimos vueltas, relajamos del viaje y a la noche con Grego nos fuimos a un bar, World Bar, uno de los tantos bares que hay por esta zona. German se quedo viendo una pelicula...
Con mi remera naranja de Holanda, que en argentina seria fashion, aca parecia un canto patriota pro Maxima Zorregueta y el Gobierno de la Naranja Mecanica, lo que produjo que desde los 10 segundos que entre al bar se me acerquen minimo, 10 holandeses (lamentablemente solo holandesEs) a preguntarme si era holandes (con la pinta que tenia, con barba record, dudo que lo crean)... pasadas las mil y una nos encontramos con un grupo de 5 tucumanas que venian de viaje de estudio... nada mas interesante que contar de eso...
Otro dia, Domingo, nos levantamos y nos fuimos a hacer el almuerzo, la noche anterior uno de los holandeses me dijo que en la cancha de rugby de la ciudad se armaba un campeonato de futbol... y justo en la cocina del hostel conocimos a iñaki, un madrileño y Tomo un loco, tambien, de Holanda... ahi armamos equipo...
Luego de comernos nuestra rica pizza recalentada del dia anterior, nos fuimos a la cancha.
Nuestro equipo: un holandes, una holandesa, un isreali, un americano de minesotta, Grego y yo. Obviamente ganamos..! un solo partido... un desastre... pero igual felices...
De ahi, cervezas y spa... a eso de las 10pm, nos fuimos todos mas otra gente que encontrabamos por el camino, hasta un bar... y de ahi... es otra historia....
Hoy, son las 10.35 am del Lunes 9 de Febrero, no hay vuelta atras, tenemos pagado, estamos en la corniza... en 2 horas me voy a tirar de Bunjy Jumping!!! El mas alto de Nueva Zelanda y el segundo, creo, mas alto del mundo... con los chicos tenemos un trato de no hablar del tema por que estamos cagados en las patas............... prefiero escribir la experiencia despues de esto... bueno, no os preocupeis... que seguro que volvemos...........
Bunjyyyyyyyyyyyyy
Saturday, February 07, 2004
Al otro dia de la caminata por los glaciares el dia volvio a ponerse horrible, asi q nos quedamos en el hostel chillauteando, spa (es un jacuzzi), y caminatas por los alrededores. Conocimos a dos simpaticos españoles de Alicante que estaban tan contentos con su viaje por Australia q nos dieron paranoia sobre tiburones, arañas asesinas y pajaros q apuntan a los ojos.
Al otro dia, nublado pero estable, nos fuimos para el otro glaciar, Fox Glacier, a 24 kilometros de ahi. Muy parecido a Franz Josef, pero con la diferencia de que del glaciar bajaba un rio donde flotaban cubos enormes de hielo. Hicimos la caminata hasta el pie del glaciar, pero con nuestro equipo de supervivencia (ojotas y remera) no era recomendable subir.
De ahi nos fuimos al lago Matheson, famosa por sus vistas del reflejo del Mount Cook (el mas alto del pais) y el Mount Aspiring. Como no podia ser mejor nuestra suerte, las nubes cubrian totalmente el paisaje, asi que solo conseguimos una linda vista del lago turbio, que valga el dato, tenia Anguilas.
Preparados para irnos, nos levantamos a la mañana con un dia despejado y con una vista excelente de 360 grados de las montanias nevadas y los glaciares. Asi que ante la desesperacion de German, nos subimos al auto y nos volvimos a Fox (haciamos base en F. Josef) donde se dio su pansada de paracaidismo. El guacho se tiro de 12000 pies con vista de los glaciares y con video incluido.
Luego de su travesia por los aires nos subimos al auto y anduvimos una hora hasta la entrada de un track de Tramping, Welcome Track, donde prometian piletas termales al final de la caminata de 7 horas. Cuando llegamos al estacionamiento, una nube de Sandflies - una mezcla de mosquitos, tiburones y piojos - se entro en el auto con grego volviendose loco, yo metido adentro de mi Mosquito Net que compre en Laos y german cocinando los Noodles de cada dia. Ante la desesperacion colectiva decidimos cancelar el castigo innecesario y volvimos a la ruta, esta vez otras dos horas de viaje hasta Wanaka. Un increible pueblo, caracterizado por su lago y las montañas que la rodean que hacen un increible paisaje de tranquilidad. Ahi nos quedamos en un camping por que los hostels estaban llenos por un festival que hay hoy, Sabado, asi que nos compramos un Johnny Walker, unos baileys y demas para acompañar la cena (aca los nz tienen grandes problemazs de alcoholemia, asi q vivimos la cultura local... chiste) y bue... sigue...
Ahi estuvimos dos noches, y seguimos rumbeando sur... ahora estamos en Queenstown, una especie de Bariloche con puentes para tirarse de Bunjy. Ahora estamos subiendo las fotos para tener libre la memoria de la camara de grego para poder sacar mas fotitos... asi que ya vendran novedades.
Bye!
Al otro dia, nublado pero estable, nos fuimos para el otro glaciar, Fox Glacier, a 24 kilometros de ahi. Muy parecido a Franz Josef, pero con la diferencia de que del glaciar bajaba un rio donde flotaban cubos enormes de hielo. Hicimos la caminata hasta el pie del glaciar, pero con nuestro equipo de supervivencia (ojotas y remera) no era recomendable subir.
De ahi nos fuimos al lago Matheson, famosa por sus vistas del reflejo del Mount Cook (el mas alto del pais) y el Mount Aspiring. Como no podia ser mejor nuestra suerte, las nubes cubrian totalmente el paisaje, asi que solo conseguimos una linda vista del lago turbio, que valga el dato, tenia Anguilas.
Preparados para irnos, nos levantamos a la mañana con un dia despejado y con una vista excelente de 360 grados de las montanias nevadas y los glaciares. Asi que ante la desesperacion de German, nos subimos al auto y nos volvimos a Fox (haciamos base en F. Josef) donde se dio su pansada de paracaidismo. El guacho se tiro de 12000 pies con vista de los glaciares y con video incluido.
Luego de su travesia por los aires nos subimos al auto y anduvimos una hora hasta la entrada de un track de Tramping, Welcome Track, donde prometian piletas termales al final de la caminata de 7 horas. Cuando llegamos al estacionamiento, una nube de Sandflies - una mezcla de mosquitos, tiburones y piojos - se entro en el auto con grego volviendose loco, yo metido adentro de mi Mosquito Net que compre en Laos y german cocinando los Noodles de cada dia. Ante la desesperacion colectiva decidimos cancelar el castigo innecesario y volvimos a la ruta, esta vez otras dos horas de viaje hasta Wanaka. Un increible pueblo, caracterizado por su lago y las montañas que la rodean que hacen un increible paisaje de tranquilidad. Ahi nos quedamos en un camping por que los hostels estaban llenos por un festival que hay hoy, Sabado, asi que nos compramos un Johnny Walker, unos baileys y demas para acompañar la cena (aca los nz tienen grandes problemazs de alcoholemia, asi q vivimos la cultura local... chiste) y bue... sigue...
Ahi estuvimos dos noches, y seguimos rumbeando sur... ahora estamos en Queenstown, una especie de Bariloche con puentes para tirarse de Bunjy. Ahora estamos subiendo las fotos para tener libre la memoria de la camara de grego para poder sacar mas fotitos... asi que ya vendran novedades.
Bye!
Monday, February 02, 2004
Fotos nuevas! Chequear a la izquierda.
Ya estamos en la gira, nos levantamos el Sabado a la mañana y al mediodia agarramos el auto (el auto es de German, para quienes quieran saber) y nos dirijimos hacia Punakaiki. El lugar tiene de caracteristico unas rocas con forma de Panqueques (asi las venden) que supuestamente en el horario de marea alta, el agua entra por los tuneles subterraneos y el agua sale increiblemente como si fuera un volcan. Obviamente no vimos nada de eso... Lindas piedras y formaciones interesantes pero nada de eso. Caminamos unos 100 metros bajando la ruta y habia unas cavernas. Agarramos nuestras linternas y nos metimos. El lugar, oscuro por supuesto, tenia unos caminos que llevaban hacia adentro. Aprovechamos para experimentar con la camara y sacamos algunas fotos con larga exposicion. Al rato aparece grego, exitado que me dice: "anda por este camino, solo y mira lo que es... segui para adelante y apaga la luz". Me dirigi hacia adentro, y lamentablemente habia dos otros turistas y atras me seguia German que con el acelere que lo caracteriza, puedo decir... que no aprecie lo mismo que grego. Seguimos paveando con las fotos y nos volvimos.
Mas tarde nos fuimos a la entrada de una caminta de Tramping que teniamos intenciones de ir, y acampamos ahi la noche para empezar el Track por la mañana. Lamentablemente desde el Sabado el tiempo no acompaña asi que por la mañana decidimos cancelarla, ya que incluia fordear rios y demas y la guia recomendaba evitarla en caso de que el tiempo no sea favorable.
Nos subimos al auto y bajamos otros 300km hasta que llegamos a Franz Josef, donde estoy en este momento. Vale agregar al comentario lo impresionante que es la ruta de la costa Oeste por donde venimos viajando. A la izquierda playas, a la derecha montañas, granjas con millones de ovejas, cada una centena de kilometros pueblos con 100 habitantes pero que tienen Kentucky Fried Chickens, Cajeros automaticos y hostels. Luego de unas 4 horas de viaje, llegamos a Franz Josef, un oasis en el camino, ajeno a nuestras expectativas es un mini bariloche repleto de gente. El lugar es un centro turistico que explota, lo mas que puede, el glaciar con el mismo nombre de la ciudad, todos los dias llegan y se van micros con turistas que hacen distintos tipos de cosas con estos hielitos.
Llegamos al mediodia, con una lluvia torrencial de no creer. Ya veiamos nuestro segundo plan de viaje frustrado por el temporal que se le habia ocurrido venirse sobre NZ justo en nuestras vacaciones.
Nos hospedamos en el Chateau Franz, realmente es el Hilton para mi... no hay arañas, tengo baño privado, la cama es como dormir en el cielo, TV de 50 pulgadas infaltable combustible para los europeos (por que no tambien para nosotros). German y Grego se metieron en el Spa (tambien tiene Spa!), con unos peludos Israelies, uno hijo de Uruguayos.
En el transcurso del dia hablabamos con gente que venia de las camintas, y se los veia mas mojados que convencidos. Sumada a la imposibilidad, debido a la niebla, de ver a los glaciares que supuestamente se apreciaban del hotel, los comentarios eran de desfavorables a castastroficos.
Al otro dia nos levantamos a las 7 de la mañana para ver como venia la mano, yo y grego decidimos no ir y German se mando nomas. Volviendo para el hotel, nos miramos y dijimos... "si despues no volvemos y se pone lindo nos matamos", asi que corrimos y antes que se vayan nos metimos en el grupo de gente. Equipados con botas para hielo, camperas y pantalones impermeables nos dejaron en los pies del glaciar.
Estoy escribiendo demasiado....
Resumiendo, caminamos 5 horas en el media del glaciar, que a diferencia del Perito Moreno (o Puerto Marino segun el guia), estaba formado dentro de un valle rodeados de montañas verdes con increibles cascadas que caian de los costados. Realmente, una imagen de Lords of the Rings.
Entre los hielos, subiendo escaleras, entre agujeros y demas... la caminata lo valio mas de lo esperado. Volvimos mojados debido a la tormenta que nos agarro en la cima y demas... pero felices.
Fijense que ahora subo las fotos.
Mas tarde nos fuimos a la entrada de una caminta de Tramping que teniamos intenciones de ir, y acampamos ahi la noche para empezar el Track por la mañana. Lamentablemente desde el Sabado el tiempo no acompaña asi que por la mañana decidimos cancelarla, ya que incluia fordear rios y demas y la guia recomendaba evitarla en caso de que el tiempo no sea favorable.
Nos subimos al auto y bajamos otros 300km hasta que llegamos a Franz Josef, donde estoy en este momento. Vale agregar al comentario lo impresionante que es la ruta de la costa Oeste por donde venimos viajando. A la izquierda playas, a la derecha montañas, granjas con millones de ovejas, cada una centena de kilometros pueblos con 100 habitantes pero que tienen Kentucky Fried Chickens, Cajeros automaticos y hostels. Luego de unas 4 horas de viaje, llegamos a Franz Josef, un oasis en el camino, ajeno a nuestras expectativas es un mini bariloche repleto de gente. El lugar es un centro turistico que explota, lo mas que puede, el glaciar con el mismo nombre de la ciudad, todos los dias llegan y se van micros con turistas que hacen distintos tipos de cosas con estos hielitos.
Llegamos al mediodia, con una lluvia torrencial de no creer. Ya veiamos nuestro segundo plan de viaje frustrado por el temporal que se le habia ocurrido venirse sobre NZ justo en nuestras vacaciones.
Nos hospedamos en el Chateau Franz, realmente es el Hilton para mi... no hay arañas, tengo baño privado, la cama es como dormir en el cielo, TV de 50 pulgadas infaltable combustible para los europeos (por que no tambien para nosotros). German y Grego se metieron en el Spa (tambien tiene Spa!), con unos peludos Israelies, uno hijo de Uruguayos.
En el transcurso del dia hablabamos con gente que venia de las camintas, y se los veia mas mojados que convencidos. Sumada a la imposibilidad, debido a la niebla, de ver a los glaciares que supuestamente se apreciaban del hotel, los comentarios eran de desfavorables a castastroficos.
Al otro dia nos levantamos a las 7 de la mañana para ver como venia la mano, yo y grego decidimos no ir y German se mando nomas. Volviendo para el hotel, nos miramos y dijimos... "si despues no volvemos y se pone lindo nos matamos", asi que corrimos y antes que se vayan nos metimos en el grupo de gente. Equipados con botas para hielo, camperas y pantalones impermeables nos dejaron en los pies del glaciar.
Estoy escribiendo demasiado....
Resumiendo, caminamos 5 horas en el media del glaciar, que a diferencia del Perito Moreno (o Puerto Marino segun el guia), estaba formado dentro de un valle rodeados de montañas verdes con increibles cascadas que caian de los costados. Realmente, una imagen de Lords of the Rings.
Entre los hielos, subiendo escaleras, entre agujeros y demas... la caminata lo valio mas de lo esperado. Volvimos mojados debido a la tormenta que nos agarro en la cima y demas... pero felices.
Fijense que ahora subo las fotos.
